ya te dije que esconder las orejas en la almohada no te hace perder el mal sueño,
tampoco hundir los párpados en el arroz le quita el color a tu piel.


muchas veces quise aprender a doblar las hojas más de 5 veces,
hasta que se rompieran.. como si con doblarlas se me limpiaran las venas,
me quedaron los calambres.
La cortina se mueve, nadie sabe.. es sólo para llevarse el polvo del piso
entra el aire y convierte mi cuarto en arenero
una taza sin café.. del más dulce
un plato con toda la comida.. desde ayer, creo
y los flaming lips sonando de fondo..